CCOO no ve otra salida ante las propuestas de ADIF y Renfe para deteriorar las empresas ferroviarias públicas en beneficio del sector privado y precarizar el empleo.
El día 4 de agosto, el Grupo Renfe
rompió las negociaciones con los sindicatos del Comité de Empresa, que
vieron inaceptables las propuestas provocativas de la empresa para
tratar de dar solución al grave problema de falta de recursos humanos en
la empresa ferroviaria. Propuestas de la empresa basadas, no en un
número determinado de nuevos contratos, como viene reclamando CCOO ante
la grave situación de falta de mantenimiento de los trenes y servicio
deficiente (no todo es AVE, de los 468 millones de viajeros, solo 19 son
de AVE) de la empresa pública, sino en condiciones económicas, en el
caso de que se contratara a alguien. Unas condiciones que hacen que la
empresa pública propicie situaciones de indignidad y pobreza laboral.
Además, la empresa ha jugado a hacer entrar a los sindicatos en una
política ya conocida de debilitamiento de las empresas ferroviarias
públicas, practicando la alternativa, también conocida, de externalizar
trabajos y privatizar actividades.
CCOO sigue pidiendo para Renfe 1.125 personas, después de las “migajas” que suponen las 75 que entrarán en los próximos meses. Con esto, el sindicato, según declara su secretario general, Manuel Mª Nicolás Taguas, “pretende que se detenga el camino hacia el deterioro total de la empresa pública, que ya tiene planes para vender el 49 % de la sociedad de Mercancías y para privatizar más el mantenimiento de trenes, amenazando así a 1.450 trabajadores/as de Mercancías y 3.300 de Fabricación y Mantenimiento, así como quienes se verán afectados indirectamente por el proceso de liberalización y de supresión de servicios regionales”.
Otro tanto ocurre en ADIF, donde CCOO solicitó la contratación de 5.300 personas para no dejar sin trabajo a áreas como Mantenimiento de Infraestructura (4.300 trabajadores/as), Venta de billetes en estaciones (900 trabajadores/as) o Circulación; sobre todo las dos primeras están sufriendo las consecuencias de las continuas privatizaciones de la actividad, deteriorando el servicio y no incrementando la seguridad en el mantenimiento de la infraestructura respecto al mantenimiento por el personal de la empresa pública.
Por ello, el Comité de Empresa de ADIF ha confirmado también la convocatoria de movilizaciones para septiembre. Los sindicatos de Renfe estudian las acciones a realizar y se confirmarán cuando estén decididas.
Según el secretario general del Sector Ferroviario de CCOO: “esta es la salida que queda para los sindicatos, una vez que las empresas ferroviarias y el ministerio siguen con su estrategia de debilitar el ferrocarril público con su política de privatizar incluso actividades que son rentables para el erario público”.
Según CCOO, las nuevas contrataciones vendrían a cubrir las necesidades inmediatas de una plantilla con 54 años de media, la más vieja de los ferrocarriles europeos, así como la más escasa (28.400 trabajadores/as ADIF+Renfe), frente a la media de los ferrocarriles de Europa (como ejemplo: España, 606 ferroviarios/as por millón de habitantes; Alemania, 3.607; Francia, 4.516; Italia, 1.285; Bélgica, 3.330; Polonia, 1.476).
Del mismo modo, España está a la cola en la cuota del transporte de mercancías (3,8% frente al 15,4% de la UE) y de viajeros (11 viajes/habitante, incluyendo Cercanías) frente al resto de países, que tienen, por ejemplo: Dinamarca, 39; Francia, 38; Luxemburgo, 37; Austria, 37; Alemania, 26; Bélgica; 21; Holanda, 18; Hungría, 17; Italia, 17; Chequia, 15; Finlandia, 13 o Portugal, 12.
El secretario general del Sector Ferroviario de CCOO, Manuel Mª Nicolás Taguas, ha recordado que “la pervivencia de las empresas públicas ferroviarias, la seguridad del ferrocarril y la calidad del servicio a usuarios, depende de una gestión dirigida al equilibrio territorial ferroviario, a la recuperación para lo público de actividades rentables externalizadas, de la potenciación del trasporte de mercancías, de las líneas convencionales de viajeros y del rejuvenecimiento de las plantillas. Por ello, CCOO, como ya anunció, ha propuesto la unidad de los sindicatos para hacer frente con movilizaciones contundentes a la gravedad de la situación de las empresas ferroviarias”.
Además, Taguas recordó que CCOO no firmará ningún ERE que no lleve consigo tasas de reposición del personal que se jubila, por lo que no se ha firmado el propuesto por ADIF para 354 personas, ya que no se garantizan nuevas contrataciones para suplir al personal que se jubila, ni las propuesta de Renfe de prescindir de personal mediante bajas incentivadas.
Por tanto, según CCOO, la calidad de un servicio actual deteriorado de mercancías y de un servicio deteriorado de viajeros en Cercanías y Regionales (el futuro del ferrocarril no es solo AVE) proviene de una gestión electoralista del ferrocarril, enfocado hacia más líneas de alta Velocidad y obviando la precariedad del servicio en grandes ciudades y capitales de provincias, tanto de trenes como de venta en estaciones. Al mismo tiempo, CCOO critica que la propia seguridad de la circulación se pueda ver mermada por la tendencia a privatizar actividades que debieran ser ejercidas por el personal de la empresa pública. Recuerda el sindicato que el objetivo de la empresa privada es la rentabilidad económica, mientras que la empresa pública invierte en asegurar los objetivos sociales de calidad y seguridad.
CCOO ha acordado con el resto de sindicatos una manifestación para el 12 de septiembre ante el Ministerio de Fomento y en los próximos días se hará efectivo el calendario de huelgas que se baraja llevar a cabo entre la primera y la segunda semana de septiembre.
CCOO sigue pidiendo para Renfe 1.125 personas, después de las “migajas” que suponen las 75 que entrarán en los próximos meses. Con esto, el sindicato, según declara su secretario general, Manuel Mª Nicolás Taguas, “pretende que se detenga el camino hacia el deterioro total de la empresa pública, que ya tiene planes para vender el 49 % de la sociedad de Mercancías y para privatizar más el mantenimiento de trenes, amenazando así a 1.450 trabajadores/as de Mercancías y 3.300 de Fabricación y Mantenimiento, así como quienes se verán afectados indirectamente por el proceso de liberalización y de supresión de servicios regionales”.
Otro tanto ocurre en ADIF, donde CCOO solicitó la contratación de 5.300 personas para no dejar sin trabajo a áreas como Mantenimiento de Infraestructura (4.300 trabajadores/as), Venta de billetes en estaciones (900 trabajadores/as) o Circulación; sobre todo las dos primeras están sufriendo las consecuencias de las continuas privatizaciones de la actividad, deteriorando el servicio y no incrementando la seguridad en el mantenimiento de la infraestructura respecto al mantenimiento por el personal de la empresa pública.
Por ello, el Comité de Empresa de ADIF ha confirmado también la convocatoria de movilizaciones para septiembre. Los sindicatos de Renfe estudian las acciones a realizar y se confirmarán cuando estén decididas.
Según el secretario general del Sector Ferroviario de CCOO: “esta es la salida que queda para los sindicatos, una vez que las empresas ferroviarias y el ministerio siguen con su estrategia de debilitar el ferrocarril público con su política de privatizar incluso actividades que son rentables para el erario público”.
Según CCOO, las nuevas contrataciones vendrían a cubrir las necesidades inmediatas de una plantilla con 54 años de media, la más vieja de los ferrocarriles europeos, así como la más escasa (28.400 trabajadores/as ADIF+Renfe), frente a la media de los ferrocarriles de Europa (como ejemplo: España, 606 ferroviarios/as por millón de habitantes; Alemania, 3.607; Francia, 4.516; Italia, 1.285; Bélgica, 3.330; Polonia, 1.476).
Del mismo modo, España está a la cola en la cuota del transporte de mercancías (3,8% frente al 15,4% de la UE) y de viajeros (11 viajes/habitante, incluyendo Cercanías) frente al resto de países, que tienen, por ejemplo: Dinamarca, 39; Francia, 38; Luxemburgo, 37; Austria, 37; Alemania, 26; Bélgica; 21; Holanda, 18; Hungría, 17; Italia, 17; Chequia, 15; Finlandia, 13 o Portugal, 12.
El secretario general del Sector Ferroviario de CCOO, Manuel Mª Nicolás Taguas, ha recordado que “la pervivencia de las empresas públicas ferroviarias, la seguridad del ferrocarril y la calidad del servicio a usuarios, depende de una gestión dirigida al equilibrio territorial ferroviario, a la recuperación para lo público de actividades rentables externalizadas, de la potenciación del trasporte de mercancías, de las líneas convencionales de viajeros y del rejuvenecimiento de las plantillas. Por ello, CCOO, como ya anunció, ha propuesto la unidad de los sindicatos para hacer frente con movilizaciones contundentes a la gravedad de la situación de las empresas ferroviarias”.
Además, Taguas recordó que CCOO no firmará ningún ERE que no lleve consigo tasas de reposición del personal que se jubila, por lo que no se ha firmado el propuesto por ADIF para 354 personas, ya que no se garantizan nuevas contrataciones para suplir al personal que se jubila, ni las propuesta de Renfe de prescindir de personal mediante bajas incentivadas.
Por tanto, según CCOO, la calidad de un servicio actual deteriorado de mercancías y de un servicio deteriorado de viajeros en Cercanías y Regionales (el futuro del ferrocarril no es solo AVE) proviene de una gestión electoralista del ferrocarril, enfocado hacia más líneas de alta Velocidad y obviando la precariedad del servicio en grandes ciudades y capitales de provincias, tanto de trenes como de venta en estaciones. Al mismo tiempo, CCOO critica que la propia seguridad de la circulación se pueda ver mermada por la tendencia a privatizar actividades que debieran ser ejercidas por el personal de la empresa pública. Recuerda el sindicato que el objetivo de la empresa privada es la rentabilidad económica, mientras que la empresa pública invierte en asegurar los objetivos sociales de calidad y seguridad.
CCOO ha acordado con el resto de sindicatos una manifestación para el 12 de septiembre ante el Ministerio de Fomento y en los próximos días se hará efectivo el calendario de huelgas que se baraja llevar a cabo entre la primera y la segunda semana de septiembre.
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