El 25 de junio se inició el proceso de cambio de uniforme. Se ha hecho sin toma de medidas al personal. Con este antecedente parecía que iba a ser un despropósito el reparto y en tan sólo dos días nuestros presagios se han cumplido.
Algunas personas se han llevado una sorpresa, su caja con la ropa no estaba dónde se le dijo que iba a estar, personal desplazado por acercamiento a domicilio de forma continuada no tiene la caja, suponemos que estará en la residencia donde se es titular, cajas que han sido enviadas a residencias con la que no se tiene ninguna relación, etc..
Al.parecer, tampoco ha servido de nada la comunicación interna del personal solicitando el cambio del punto de recogida. Lo teníamos que haber registrado ante notario pero, ¿de qué hubiese servido.
El personal se ha desplazado en su tiempo libre a determinados sitios para recoger el nuevo uniforme, pero, ¿con qué se compensa ese tiempo libre? Si no llega el nuevo uniforme para cuando la dirección comunique la obligaciónr de ponerse el nuevo, ¿el servicio de "paquetería" se pondrá a funcionar?
Por todo ello, "felicitamos a la dirección" por su capacidad de organización"
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